Capitulo II
Confianza
Confianza
No… no podía… pero… tenía que hacerlo.
-Es sobre el sueño que te mencioné- le dije en cuanto se aparto un poco de mí.
-Entonces, no fue un sueño, sino una pesadilla. Y debo asumir que ese sueño te tiene con miedo porque puede hacerse realidad ¿Cierto?
-Pues sí y no… Y según mi punto de vista, sí es verdad lo que soñé y más que miedo, son celos y coraje.-Me miró confundido. Las palabras revoloteaban en mi cabeza como mariposas en mi estómago.
-Vamos Nessie, sabes que puedes confiar en mí…
-Sí, lo sé… Pero estoy segura de que cuando me escuches…- no pude emitir sonido después de eso, no tenía la fuerza para decirle que su impronta no me tenía del todo convencida.
-Quiero escucharlo, sea lo que sea, viniendo de ti sé que no me disgustará.-Me miró de nuevo fijamente a los ojos y perdida en ese momento comencé a hablar…
-En realidad fue un sueño hermoso al principio… En el sueño estábamos tú y yo solamente, nadie más, fueron momentos realmente hermosos-No sé porque no paré de hablar en ese momento, me tenía hipnotizada, apenas podía respirar, pero solté todo… TODO… ¡Oh! No…- Solos tú y yo a la orilla de un hermoso río en medio del profundo bosque, después me besaste y me dijiste que me amabas más que a nadie en el mundo y cuando yo te preguntaba si lo decías enserio llegó mamá y te besó… Ahí terminó todo- Oh Oh… se lo dije… ¡SE LO DIJE!
Él, solo comenzó a reírse, tales carcajadas hicieron que mi corazón latiera a toda velocidad.
-¿Qué pasa? ¿Por qué te ríes?- le pregunte, su risa me había sacado de trance.
-Es que… ¿eso era lo que te tenía tan frustrada?- me pregunto entre risas. No sólo se lo había dicho a él, seguro mi padre ya se había enterado también, mi mente sólo podía estar en el sueño y seguro que lo escuchó.
-Sí- contesté muy apenada.
-Vaya, tú sí que tienes imaginación… jamás pensé que sintieras eso respecto a tu ma…
-¡Vamos Jacob! … ¡Sabes que es cierto! – grité interrumpiéndolo
-Ness, relájate… A tu mamá la quiero y mucho, es mi mejor amiga, siempre lo ha sido. Pero tú eres diferente, ya te expliqué lo que significa para nosotros la impronta…
-Lo sé- lo interrumpí de nuevo, pero esta vez bajé la mirada- Sé que la impronta es… algo que no se decide etc etc…-trataba de que mi voz no se quebrara tanto, pero no tuve mucho éxito- pero ese sueño sé que es cierto, ¡Tú sigues enamorado de ella!
-Renesmee… escúchame-suplicó
-Realmente no quiero hacerlo, me voy a dormir… Buenas noches- No sé si lo dejé hablando sólo o no, lo único que recuerdo es que en unos segundos me encontraba en mi habitación y mis mejillas estaban húmedas. Las lágrimas brotaban contra mi voluntad y no tenían fin.
No sé exactamente a qué hora me quedé dormida, pero cuando desperté mi padre me tenía entre sus brazos, podía sentir que su piel era fría pero no me afectaba tanto como a un humano normal. Mi papá, a pesar de haber leído cada uno de mis pensamientos, no le mencionó nada a nadie.
-Buenos días pequeña, ¿cómo estás ahora?- me preguntó, me di la vuelta en mi cama para verlo de frente e intenté leer su rostro, pero estaba como siempre, como una figura perfecta de mármol, tranquilo.
-Mejor, gracias.- A pesar de lo que acababa de decir las lágrimas volvieron a brotar de mis ojos y me aferré al pecho de mi papá.
-Llora todo lo que quieras pequeña, desahógate…
-¿Por qué… Jake… no me… quiere… como a… mamá?-le pregunté entre llanto y sollozos.
-Porque… A pesar de ser de la misma sangre, ambas son diferentes. Y claro que Jacob no las quiere igual. Él quiere a tu madre como su mejor amiga nada más… A ti…- se quedó callado, como si no pudiera mencionar la palabra.
Me tranquilicé.
- ¿Jake me ama, papá?- tenía tanta esperanza de que así fuera que cuando hice la pregunta deje de llorar.
-Eso no me corresponde a mí decírtelo, cariño. Pero estoy seguro de que eres la única en su mente.
Después de tranquilizarme un poco más, me metí al baño, me di una ducha y me vestí.
Mientras estaba en mi habitación mirando por la ventana, mi papá regreso y me abrazó.
-Gracias-le susurré.
-No tienes que agradecerme, por eso soy tu papá.
-Enserio, muchas gracias, eres la persona en la que más confió.
-Gracias por tenerme confianza, Nessie. Te amo pequeña.
-Yo también te amo, papá.
-Ness, necesitamos hablar.-dijo Jacob desde el otro lado de la puerta, interrumpiendo ese hermoso momento con mi padre.
“Aún no estoy lista, papá” pensé.
-Pasa Jacob- contestó él, como si ese pensamiento lo hubiera ignorado a propósito.
Jacob entró a mi habitación y mi papá, sin decir palabra se fue y nos dejo solos. Yo me quedé inmóvil sentada sobre la cama mirado al suelo, no quería verlo a los ojos; me sentía... no lo sé, ya no sabía lo que sentía. Jake se sentó a mi lado por un breve momento y después…
-Lo siento- dijimos ambos al mismo tiempo.
-Déjame hablar por favor- me pidió, asentí con la cabeza y continuó- Nessie siento mucho que creas que aún sigo enamorado de Bella. La quiero mucho, pero no tanto como a ti- podía sentir el calor en mis mejillas.
-¿Me quieres más a mí?- pregunte sin pensar, y lo hice como si estuviera hablando conmigo misma, pero Jacob escucho claramente lo que decía.
-Claro que sí. Si algo te pasará o no quisieras estar más conmigo, me muero. Eres la persona más especial e importante en mi vida.
Pero…
-Renesmee, eres la persona a la que más amo…-Me quedé perpleja, ¿sería verdad? ¿Me amaba a mí y no a mi madre?
Volteé la cara para ver esos ojos que me volvían loca y encontrar la verdad en ellos, pero antes de que pudiera siquiera dar un respiro, me besó.
Pude sentir el calor de su mano contra mi cuello, sus suaves y delicados labios contra los míos, su aliento, de un momento a otro ya no estábamos en mi habitación, estábamos flotando en las nubes, o en las estrellas, no tenía ideas claras, pero estaba segura que sólo éramos Jacob y yo. Ese beso era tierno, era excelente, era MI PRIMER BESO.
Por mí, me hubiera quedado así por siempre, pero la necesidad de respirar no me lo permitió. Nos separamos lentamente, y en cuanto abrí mis ojos bajé la mirada, ya que sabía muy bien que los colores se me habían subido al rostro nuevamente, no podía pensar, no podía hablar. Nos quedamos en silencio por un breve momento hasta que Jake se volteó hacia a mí y me preguntó…
-¿Aún sigues dudando de lo que siento por ti?
-…- No podía contestarle, me faltaba el aliento.
-Vamos Ness, me alejaré si me lo pides, por mucho que me cueste, pero ten la confianza de decirme…
-Jake- lo interrumpí, ya se me había hecho una costumbre interrumpirlo- tú eres la persona más importante para mí. Y aunque pienses que sólo soy una niña de 15 años, estoy segura que a la persona que quiero es a ti. Sólo tú, Jacob, puedes hacerme feliz. Tú eres mi mejor amigo, alguien en quien puedo confiar, mi alma gemela…- oncluí, dejando la última palabra volando en el aire.
Nos quedamos en silencio, mirándonos el uno al otro… me sonrió y me volvió a besar... SIGUIENTE CAPITULONo… no podía… pero… tenía que hacerlo.
-Es sobre el sueño que te mencioné- le dije en cuanto se aparto un poco de mí.
-Entonces, no fue un sueño, sino una pesadilla. Y debo asumir que ese sueño te tiene con miedo porque puede hacerse realidad ¿Cierto?
-Pues sí y no… Y según mi punto de vista, sí es verdad lo que soñé y más que miedo, son celos y coraje.-Me miró confundido. Las palabras revoloteaban en mi cabeza como mariposas en mi estómago.
-Vamos Nessie, sabes que puedes confiar en mí…
-Sí, lo sé… Pero estoy segura de que cuando me escuches…- no pude emitir sonido después de eso, no tenía la fuerza para decirle que su impronta no me tenía del todo convencida.
-Quiero escucharlo, sea lo que sea, viniendo de ti sé que no me disgustará.-Me miró de nuevo fijamente a los ojos y perdida en ese momento comencé a hablar…
-En realidad fue un sueño hermoso al principio… En el sueño estábamos tú y yo solamente, nadie más, fueron momentos realmente hermosos-No sé porque no paré de hablar en ese momento, me tenía hipnotizada, apenas podía respirar, pero solté todo… TODO… ¡Oh! No…- Solos tú y yo a la orilla de un hermoso río en medio del profundo bosque, después me besaste y me dijiste que me amabas más que a nadie en el mundo y cuando yo te preguntaba si lo decías enserio llegó mamá y te besó… Ahí terminó todo- Oh Oh… se lo dije… ¡SE LO DIJE!
Él, solo comenzó a reírse, tales carcajadas hicieron que mi corazón latiera a toda velocidad.
-¿Qué pasa? ¿Por qué te ríes?- le pregunte, su risa me había sacado de trance.
-Es que… ¿eso era lo que te tenía tan frustrada?- me pregunto entre risas. No sólo se lo había dicho a él, seguro mi padre ya se había enterado también, mi mente sólo podía estar en el sueño y seguro que lo escuchó.
-Sí- contesté muy apenada.
-Vaya, tú sí que tienes imaginación… jamás pensé que sintieras eso respecto a tu ma…
-¡Vamos Jacob! … ¡Sabes que es cierto! – grité interrumpiéndolo
-Ness, relájate… A tu mamá la quiero y mucho, es mi mejor amiga, siempre lo ha sido. Pero tú eres diferente, ya te expliqué lo que significa para nosotros la impronta…
-Lo sé- lo interrumpí de nuevo, pero esta vez bajé la mirada- Sé que la impronta es… algo que no se decide etc etc…-trataba de que mi voz no se quebrara tanto, pero no tuve mucho éxito- pero ese sueño sé que es cierto, ¡Tú sigues enamorado de ella!
-Renesmee… escúchame-suplicó
-Realmente no quiero hacerlo, me voy a dormir… Buenas noches- No sé si lo dejé hablando sólo o no, lo único que recuerdo es que en unos segundos me encontraba en mi habitación y mis mejillas estaban húmedas. Las lágrimas brotaban contra mi voluntad y no tenían fin.
No sé exactamente a qué hora me quedé dormida, pero cuando desperté mi padre me tenía entre sus brazos, podía sentir que su piel era fría pero no me afectaba tanto como a un humano normal. Mi papá, a pesar de haber leído cada uno de mis pensamientos, no le mencionó nada a nadie.
-Buenos días pequeña, ¿cómo estás ahora?- me preguntó, me di la vuelta en mi cama para verlo de frente e intenté leer su rostro, pero estaba como siempre, como una figura perfecta de mármol, tranquilo.
-Mejor, gracias.- A pesar de lo que acababa de decir las lágrimas volvieron a brotar de mis ojos y me aferré al pecho de mi papá.
-Llora todo lo que quieras pequeña, desahógate…
-¿Por qué… Jake… no me… quiere… como a… mamá?-le pregunté entre llanto y sollozos.
-Porque… A pesar de ser de la misma sangre, ambas son diferentes. Y claro que Jacob no las quiere igual. Él quiere a tu madre como su mejor amiga nada más… A ti…- se quedó callado, como si no pudiera mencionar la palabra.
Me tranquilicé.
- ¿Jake me ama, papá?- tenía tanta esperanza de que así fuera que cuando hice la pregunta deje de llorar.
-Eso no me corresponde a mí decírtelo, cariño. Pero estoy seguro de que eres la única en su mente.
Después de tranquilizarme un poco más, me metí al baño, me di una ducha y me vestí.
Mientras estaba en mi habitación mirando por la ventana, mi papá regreso y me abrazó.
-Gracias-le susurré.
-No tienes que agradecerme, por eso soy tu papá.
-Enserio, muchas gracias, eres la persona en la que más confió.
-Gracias por tenerme confianza, Nessie. Te amo pequeña.
-Yo también te amo, papá.
-Ness, necesitamos hablar.-dijo Jacob desde el otro lado de la puerta, interrumpiendo ese hermoso momento con mi padre.
“Aún no estoy lista, papá” pensé.
-Pasa Jacob- contestó él, como si ese pensamiento lo hubiera ignorado a propósito.
Jacob entró a mi habitación y mi papá, sin decir palabra se fue y nos dejo solos. Yo me quedé inmóvil sentada sobre la cama mirado al suelo, no quería verlo a los ojos; me sentía... no lo sé, ya no sabía lo que sentía. Jake se sentó a mi lado por un breve momento y después…
-Lo siento- dijimos ambos al mismo tiempo.
-Déjame hablar por favor- me pidió, asentí con la cabeza y continuó- Nessie siento mucho que creas que aún sigo enamorado de Bella. La quiero mucho, pero no tanto como a ti- podía sentir el calor en mis mejillas.
-¿Me quieres más a mí?- pregunte sin pensar, y lo hice como si estuviera hablando conmigo misma, pero Jacob escucho claramente lo que decía.
-Claro que sí. Si algo te pasará o no quisieras estar más conmigo, me muero. Eres la persona más especial e importante en mi vida.
Pero…
-Renesmee, eres la persona a la que más amo…-Me quedé perpleja, ¿sería verdad? ¿Me amaba a mí y no a mi madre?
Volteé la cara para ver esos ojos que me volvían loca y encontrar la verdad en ellos, pero antes de que pudiera siquiera dar un respiro, me besó.
Pude sentir el calor de su mano contra mi cuello, sus suaves y delicados labios contra los míos, su aliento, de un momento a otro ya no estábamos en mi habitación, estábamos flotando en las nubes, o en las estrellas, no tenía ideas claras, pero estaba segura que sólo éramos Jacob y yo. Ese beso era tierno, era excelente, era MI PRIMER BESO.
Por mí, me hubiera quedado así por siempre, pero la necesidad de respirar no me lo permitió. Nos separamos lentamente, y en cuanto abrí mis ojos bajé la mirada, ya que sabía muy bien que los colores se me habían subido al rostro nuevamente, no podía pensar, no podía hablar. Nos quedamos en silencio por un breve momento hasta que Jake se volteó hacia a mí y me preguntó…
-¿Aún sigues dudando de lo que siento por ti?
-…- No podía contestarle, me faltaba el aliento.
-Vamos Ness, me alejaré si me lo pides, por mucho que me cueste, pero ten la confianza de decirme…
-Jake- lo interrumpí, ya se me había hecho una costumbre interrumpirlo- tú eres la persona más importante para mí. Y aunque pienses que sólo soy una niña de 15 años, estoy segura que a la persona que quiero es a ti. Sólo tú, Jacob, puedes hacerme feliz. Tú eres mi mejor amigo, alguien en quien puedo confiar, mi alma gemela…- oncluí, dejando la última palabra volando en el aire.
Nos quedamos en silencio, mirándonos el uno al otro… me sonrió y me volvió a besar...